Cine en palabras

Sinopsis:

Una reunión familiar se convierte en una confrontación de incómodas verdades cuando Leonardo les deja saber a sus hijas la posibilidad de vender el rancho en el que crecieron.

El inicio de esta película es quizá lo menos encantador que tiene. Durante 20 minutos la cinta se da la tarea de presentarnos a cada integrante de la familia, nos deja ver un poco de la relación que hay entre los hermanos, así como aquella entre padre e hijos. Si bien este tipo de introducción funciona bastante bien para el desarrollo de la trama, la forma en que lo hace puede alejar a ciertos espectadores por la cantidad de groserías y comentarios obscenos que dicen los personajes. Este detalle se siente como algo de relleno, pues para nada se relaciona con la personalidad de los protagonistas o su contexto, simplemente está por estar y eso puede resultar un tanto molesto, sobre todo porque los primeros 20 minutos de la cinta serían aun más relevantes y le darían un toque de dramatismo al resto de la película si no cayeran en tanta vulgaridad.

Afortunadamente, habiendo pasado esta introducción, Familia adquiere un tono muy diferente, un tanto más serio y dramático. Es aquí donde las actuaciones comienzan a sentirse en serio, pues cuando aparece el conflicto principal, los personajes sacan lo mejor y lo peor de ellos mismos en un juego del lenguaje oral y corporal que realmente engancha al espectador, sobre todo a un nivel emocional, llegando incluso a sacar una que otra risa o lágrima según sea el caso.

Además de esto, pareciera que lo que estamos viendo es una puesta en escena de un conflicto familiar común y corriente que le pudiera pasar a cualquier familia. Esto hace que las actuaciones, los personajes y los diálogos se sientan naturales, ofreciendo un festín de reacciones emotivas y racionales que se pueden presentar ante una situación como la que estamos viendo en pantalla.

Si bien esto es algo que se mantiene durante el resto de la película, aunque llega a regresar por momentos al tono de la escena introductoria, es después de que surge el conflicto principal que la película comienza a decaer, pues son los mismos personajes quienes sacan a la luz duras verdades que deben afrontar, pero que en lugar de ser abordadas son dejadas a un lado y ya no se muestran sus consecuencias, dejando entonces que el conflicto se resuelva fuera de cámara y dejando al espectador con una sensación de que la cuestión queda inconclusa. Esto hace que la película se sienta lenta en su segunda mitad, pues parece que lo demás que vemos es puro chisme familiar en lugar de una verdadera resolución de conflicto.

Así mismo, esto último se relaciona con la poca profundidad con la que se aborda lo que se da a entender que es el tema central de la cinta: la pérdida. Este tema se aborda en varias escenas y de diferente manera, pues no necesariamente es en relación a una persona, sino también a otro tipo de pérdidas que se experimentan en la vida. A pesar de ser un tópico constante, no se le da mucha prioridad, pues como mencioné anteriormente, el resto de la película nos deja saber otros chismes de los integrantes de la familia, y nos muestra la verdadera relación que hay entre ellos sin ahondar en el tema central que pareciera unir este guion.

En resumen, Familia es una película que vale la pena darle una oportunidad, sobre todo por la calidad de sus actuaciones, especialmente en el caso de Giménez Cacho, pero que también puede ofrecer algunas reflexiones en cuanto a las apariencias que se guardan entre la propia familia.

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